El huerto en enero
Y llegó el 2015 y en este primer mes del año la actividad en el huerto continúa.
En el huerto en este mes de enero tenemos escarola, espinacas, borrajas, lechugas, cebollas
y otras hortalizas más para pasar el invierno.
Enero lo podemos dedicar a proyectar nuestro huerto y organizarnos teniendo en cuenta varios factores como:
– Diseñar el plan de cultivos de acuerdo a la alternancia y compatibilidad de cultivos o sea la rotación, cada año o dos años, de los diferentes tipos de
hortalizas en un mismo espacio de terreno con la finalidad de ir
alternando plantas con necesidades nutritivas y características de
desarrollo diferentes;
hortalizas en un mismo espacio de terreno con la finalidad de ir
alternando plantas con necesidades nutritivas y características de
desarrollo diferentes;
– Limpieza de la caseta y de los arcones reparando, reemplazando o eliminando las herramientas de acuerdo a su estado;
– Comprar semillas y árboles frutales a raíz desnuda;
Ultima oportunidad para sembrar habas aunque si las hubiésemos sembrado en noviembre
estarían como las de esta imagen.
– Comprobar que aquellos frutos que tenemos guardados de reserva como patatas, calabazas, cebollas, ajos, etc. se encuentren en buenas condiciones y si no es así, echarlos a la pila de compostaje preferentemente quitándoles las semillas para que no germinen.
– Si aún no lo hemos puesto, es un momento propicio para diseñar la instalación de un sistema de riego planteando la ubicación definitiva de los bancales y de los cultivos del huerto que aunque aún no sea necesario ponerlo, es conveniente tenerlo estudiado para que pueda estar disponible cuando más lo necesitemos que es en primavera y verano, ya que ahora no necesitamos regar más que aquellos cultivos que estén protegidos contra el frío y, de ser posible, con agua templada y en poca cantidad en las horas más cálidas del día.
Como en el mes anterior, ventilaremos los túneles y toda protección contra el frío en los momentos del día que hay más sol y seguiremos teniendo el agua cortada para que al congelarse, no revienten las tuberías.
Los guisantes entutorados ya empiezan a florecer y pronto nos darán sus vainas con sus frutos.
Con luna menguante, el 13 de enero, podemos sembrar achicoria, acelga, berza, borraja, brócoli, canónigo, cebolla,
chalotas, cogollos, coliflor, escarola, espinaca, guisantes, hinojos, lechuga, lombarda, nabo, perejil, rábano, romanescu, trigo y
zanahoria. Tanto los ajos como las habas los tendríamos que haber sembrado en
noviembre y ahora contemplar sus tiernos brotes asomando de la tierra
pero si no lo hemos hecho, es ahora la última oportunidad para
sembrarlos.
chalotas, cogollos, coliflor, escarola, espinaca, guisantes, hinojos, lechuga, lombarda, nabo, perejil, rábano, romanescu, trigo y
zanahoria. Tanto los ajos como las habas los tendríamos que haber sembrado en
noviembre y ahora contemplar sus tiernos brotes asomando de la tierra
pero si no lo hemos hecho, es ahora la última oportunidad para
sembrarlos.
La borraja tiene propiedades expectorantes, depurativa, sudorífera, diurética, antiinflamatoria, etc.
Como hace frío y hay heladas es conveniente proteger esos cultivos en túnel o invernadero. Además con fase menguante es beneficioso podar los árboles y la viña guardándonos los sarmientos para hacer asados en la barbacoa.
Una forma muy económica y fácil de proteger de las heladas los brotes tiernos de las plantas
con garrafones de agua mineral.
En cambio, aprovecharemos la luna creciente, el 27 de enero, para cavar surcos en los que distribuiremos el estiércol o el compost y, posteriormente, removeremos el terreno con una azadilla cubriéndolo con tierra.
También con esta luna es recomendable sembrar castañas y huesos de frutas en macetas como así también plantar a raíz desnuda manzanos, perales, membrilleros y nogales, acodar nísperos y realizar los injertos en los avellanos.
Época de sembrar y también cosechar acelgas para hacer una rica empanada rellena.
Pero no todo es sembrar y plantar porque también tenemos nuestra recompensa ya que ahora es el momento de recoger esos cultivos resistentes que nos salvan del crudo invierno: berzas, brócolis, coliflores, puerros, cardos, romanescus y lombardas son las hortalizas que tendrán presencia en nuestro menú invernal.
La lombarda es una col rica en calcio, ácido fólico, es diurética y un antiácido natural para el estómago.